Hoy os voy a hablar de un libro que he leído en poco tiempo del autor Eloy Moreno llamado Cuando era divertido publicado por Ediciones B. Es el propio autor el que nos da un aviso antes de empezar a leerlo y nos dice que es una historia no adecuada para todas las edades. También es oportuno comentar que el libro tiene banda sonora y que la podéis escuchar a través de un código qr que te lleva a una lista de Spotify creada por el propio autor.
Comenzamos la lectura con una frase de Vetusta Morla (ya empezamos a conocer sus gustos musicales) y con una escena que podría ser una fotografía, de una pareja de enamorados en la calle mientras nieva. Para continuar con una frase anónima y la que da pie al comienzo de la historia.
Creo que el autor ha querido dejar una impronta en este libro de la importancia de luchar por lo que uno quiere, y hablar en alto. Sea tanto hombre como mujer y no quedarse estancado en zona de confort, sino perseguir tus sueños. El libro está dividido en diez capítulos que dan título a cada uno de los comienzos según va avanzando la historia. Así nos encontramos: Su mundo, la cena, sexo, la tormenta, ¿quién es?, La esperanza, la oportunidad, guerra, el final y fin.
Hay pocos protagonistas en esta historia, los principales coinciden en nombre y en destino, Alejandra y Alejandro (Ale y Ale) y a los que en alguna ocasión en la historia no sabes diferenciar porque se les llama igual. Otra pareja Carlos y Marta. Y Alicia que es la hermana de Alejandra.
“Siempre hay un instante que lo cambia todo”
Al hablar del capítulo de Su mundo se habla sobre el milagro del ser humano y de los miedos de nuestra protagonista Alejandra. La pareja que forman Ale y Ale ha entrado en una rutina difícil de salvar y Eloy nos muestra los sentimientos encontrados de ambos: uno quiere amor y el otro solo siente cariño. El autor recurre al recurso de ir hacia atrás en su narración en más de una ocasión y nos ubica veinte años antes en el que nos cuenta cómo y dónde se conocieron. Pero el presente ya no es igual al pasado. La monotonía ha llegado a sus vidas y es ella la que observa por el balcón a otras parejas.
En La Cena es cuando conocemos a los otros personajes de la historia que tienen poco protagonismo. Ellos acaban de realizarse una reforma de la casa y van a cenar con ellos y entre ellos aprovechan para desahogarse. También el autor, a través del personaje de Marta nos muestra que las apariencias engañan y que por mucho que una pareja pueda ser idílica puede que no lo sea. Con esa pareja que forman Marta y Carlos se reflexiona sobre las faltas de respeto y el uso del móvil. Hay momentos de mucha tensión y el autor lo refleja…hasta el punto de que no sabes por donde va a salir la ira.
También sabemos que los recuerdos y los momentos complicados por los que está pasando la pareja de Ale y Ale ocurren cuando regresan y pasan por La Casa Azul en la que pasaron grandes momentos y les desbordó la pasión. Alejandra le desborda toda esta situación y percibe que hace años que ya no se buscan ni siquiera para tener sexo. A pesar de que en la novela sí aparecen escenas de sexo.
“¿Cuántos recuerdos caben en un solo segundo’”
Además de la banda sonora que acompaña a la novela, se hace referencia a otras canciones como la de The blues doors de Angus Stone y Náufrago de Sóber.
En La tormenta se habla de nuevo de la rutina en la que se ve sumergida la pareja y de la presión de la familia por buscar otro hijo. Él quiere proponerle un viaje a su pareja, pero ella se ve agobiada y reflexiona mucho sobre qué es lo que está haciendo con su vida. Ella necesita tomar las riendas y tener el valor para hablar con su marido quien no se lo pone fácil. Mientras ella tiene un affaire con un compañero de trabajo. De Ale sabemos que es una persona que no guarda secretos e impulsiva por cuando dice “tiene que ser hoy” porque no puede más. Tengo que resaltar también las palabras en cursiva que también de vez en cuando resalta el autor para ponerle más énfasis y que te fijes en lo que se está diciendo.
“Siempre hay dolor cuando los sentimientos de dos personas no coinciden”
Como decía antes hay momentos de mucha tensión entre la pareja, pero si algo debo resaltar es el silencio y los gritos. El hijo de ambos tiene cuatro años y es una víctima de la situación de sus padres. Hay un tema crucial en esta novela y es la culpa. Ale se siente culpable en todo momento (a pesar de no tenerla) y se justifica de manera continua. A pesar de que ella quiere actuar de la forma diferente a la que se le ha impuesto.
En La esperanza parece que hay paz como el título avanza, pero vuelve el dolor y la culpa. Se abrazan con miedo y se reflexiona sobre si van a poder a volver a recuperar la ilusión y que ambos tienen que poner de su parte y volver a vivirlo todo como si fuera la primera vez, pero eso no es posible, porque las personas avanzamos y no nos quedamos en el pasado. La situación llega a tal punto en el que tienen miedo a perderse y se piden perdón, pero en esa relación no hay nada que salvar porque está perdida. Además, Ale no es eso lo que quiere.
En El odio ves por un momento peligrar a alguno de los personajes y tal y como titula el capítulo vuelve la monotonía a la habitación y de nuevo los insultos y los gritos vuelven a la escena, pero esta vez acompañado de un cuchillo. Ella no siente nada y el dolor no le deja vivir, es momento de que Ale tome las riendas y se dé un tiempo para ella que es lo que necesita para empezar su vida de cero.
Con Ale vivimos los recuerdos y la culpa y se lanza una pregunta junto a su hermana Alicia ¿con quién te gustaría estar ahora? Junto a ella se reflexiona sobre si entra una tercera persona en una pareja de dos y de nuevo la reflexión sobre no ser la misma persona del pasado y de los recuerdos. También del daño que se hace al pensar que una pareja es para siempre y lo que influyen las opiniones de los demás al tener que comunicar una ruptura a familiares y conocidos.
Vamos llegando al final acompañados de nuevo de los recuerdos en papel y en el que se rememora los primeros años de todo y en el que se hace referencia al título de la novela. Ale y Ale lloran porque expresan sus sentimientos, pero al final lo que sucede es lo mejor para ambos y es lo que da por finalizada la novela.
El autor acaba con un apartado titulado Fin en el que da las gracias a las personas por leer su libro, a los mensajes que le dan tras la firma de sus ejemplares y nos aclara que le gusta realizar novelas en las que haya temas que emocionen o transmitan sentimientos. Él mismo nos facilita su email para escribirle y contarle lo que nos ha parecido la historia. Yo sin duda le haré llegar esta reseña escrita con el corazón.