La ganadora de este año del Premio Azorín de Novela ha sido para Nativel Preciado con su novela El santuario de los elefantes y es de las que os voy a hablar.
La novela galardonada se divide en tres partes bien diferenciadas y en unos personajes que no van a dejar de sorprenderte. También tengo que deciros que la portada me ha encantado, un lugar idílico en un escenario en el que nos transportamos a África, pero en el que la misión que tienen alguno de ellos no es tan agradable.
El santuario de los elefantes va dedicada a Nacho González que adora los elefantes y junto a él una frase de Kapuscinski. Como podréis observar todo está escrito y cuidado con el máximo detalle.
En el Preámbulo ya aparece un personaje llamado Helani un tanzano que va a contar lo que nadie le preguntó. A través de este primer apartado podemos intuir ya por donde van a ir los tiros de la novela y el mensaje y la impronta que nos quiere dejar su autora. Sabemos que la autora guarda un gran cariño por todo lo relacionado con África y se reflexiona sobre lo que ha ocurrido con dicho país, así como también una reflexión acerca del turismo y el caos del país.
“El poder decide quién come y quién pasa hambre”
También me da que pensar que lo que retrata Nativel es una vivencia algo personal, de una situación real ya que al principio se nos introduce la historia de una persona que cambió la suya.
Me ha gustado en la novela que cada una de las partes, se introduce con una frase para la reflexión, en el caso de la primera es una frase de Javier Reverte, en la segunda del diario de Patrick Wells y en la tercera de Diego García Guillén. Nadie escogido al azar.
Y los primeros personajes que nos va a describir su autora entre los que nos encontramos a Marcos y Elizabeth Blum, Adriana Claire, Carlos Alba, Dr. Antoine Kapa, Saúl Mena y Eduardo Torres. Cada uno se nos describe con minuciosidad y sabemos sus inquietudes desde el principio. Sus aspiraciones y lo que quieren alcanzar. Lo que no saben es que el destino tiene otro plan para ellos. Vemos ya pinceladas en cuanto al PODER y la CORRUPCIÓN, y en lo que cree la gente que puede todo manipularlo mientras se deja llevar por esa ambición.
Vamos a conocer de la mano de su autora la cultura suajili y la árabe y muchos aspectos relacionados con África y con sus habitantes
También el tema del divorcio como una liberación. Es curioso cómo los escritores siempre llevan a sus novelas temas de actualidad y lo envuelven a través de la ficción. En esta novela en concreto me ha llamado la atención que se hable del rey emérito del que se nombra en varias ocasiones y se destaca su papel aunque también sus errores y se hace una reflexión sobre la monarquía. También del coronavirus, me ha llevado a pensar que fue una novela que fue escrita durante esa época y que la califica como una amenaza mundial real.
“Lo que siembras no crece de inmediato, hay que ser pacientes y esperar”
Sabemos que los personajes quieren ir a África, pero las intenciones de ellos no son nada buenas. Sí que hacen equipo, pero al llegar allí e ir desarrollándose las circunstancias hay otros personajes que van a pensar que son ellos los que quieren tomar otro camino. En ocasiones nos planteamos la vida tan organizada y a veces hay que dejarse sorprender por la vida ese es el mensaje que creo que nos da Nativel, así como los valores que esconden los personajes.
Si me tengo que quedar con un personaje y quiero dedicarle un poco más de líneas es con Adriana. Ella es una judía errante y es galerista. Una mujer culta, elegante, sociable y divertida, aunque también ha sufrido. Gracias a ella conocemos la liberación de la mujer en la sociedad y es un personaje crucial en la novela. Y bueno también debería nombrar a Julia, que podrían ir en conjunto de la mano. Julia es fotógrafa y amante del jazz, pero también está muy segura de sí misma.
Aparece un término que también nos va a acompañar a lo largo de la novela, que es la INTUICIÓN. ¡Y qué gran poder el de la intuición! Y al que se hace referencia en varias ocasiones a lo largo de la misma.
Va a ser un viaje a Tanzania en el que unos lo van a aprovechar y otros se van a quedar en el camino, pero todos van a extraer alguna enseñanza que les va a llevar a tomar unas decisiones u otras. Son un grupo de nueve personas que lo cierra Julia Soros.
“Sin riesgo no se logra nada que merezca la pena”
En la novela también se habla acerca de los prejuicios morales, es Julia quien viene a desordenar todo y también es víctima porque se le tiende una trampa. Lo que no entiendo muy bien es cómo los propios personajes te van dando pistas para darte cuenta que no tienen nada que ver entre ellos.
Ya en la Segunda parte y tras todos los preparativos empieza el viaje. Julia es un personaje que también va a sufrir, ya que es el centro de atención por la incorporación tan “rara” que ha tenido en el grupo como fotógrafa. Son las mujeres las que la interrogan porque no la aceptan del todo. Ahora nos ubicamos en el centro de operaciones que es Tarangire.
Se habla sobre el maltrato de los animales y su acción tras la mano del hombre. El libro podría decirse que tiene una parte muy importante de crítica porque se tratan temas como los problemas del país, los medios de comunicación las redes sociales, etc. y lo que nos meten en la cabeza, así como que la población está intoxicada. Por varias frases que he captado de Nativel creo que para ella también ha sido un reto escribir esta novela y un riesgo.
Adentrándonos en el Parque Nacional del Lago nos adentramos en Masai Mara y a través de un baobab se nos recuerda el cuento de El Principito. Más tarde también se hará referencia al libro Sapiens.
Curiosos los conocimientos de los elefantes en los que ha tenido que indagar la autora para hablar de ellos y en la similitud que tienen con los humanos de la mano de otro personaje llamado Konrad Lorenz un médico biólogo. También de las similitudes genéticas que se presentan y de una enfermedad arraigada en África como es el sida.
Van a ser Adriana y Patrick quienes van a plantearse crear una sede para que los elefantes estén cuidados y protegidos. De ello el título de la novela.
“Hay veces en la vida en las que no puedes torturarte con cosas que nunca sabrás”
En la novela hay momentos duros, momentos que te encogerá el corazón y momentos en que los personajes estarán en la tesitura de tomar decisiones y cambiar su viaje.
Vamos llegando a una tercera parte en la que la narrativa da lugar a reflexiones por parte de la autora en la que se nos dice que nadie se da cuenta del ritmo en el que vivimos. De cómo se introduce en la trama de la novela, el coronavirus sin notarlo. Y de cómo esta tercera parte quizá va dedicada a los sanitarios porque al empezar ya es una frase de Diego García Guillén que es un médico, escritor y filósofo español. Trata Nativel con mucha ternura esta última parte y también y en relación a Adriana se nos hace referencia a Jane Goodall.
“Los hechos no suceden por casualidad, tarde o temprano el tiempo suele poner las cosas en su sitio”
Y digo con cariño porque es en el capítulo veinte donde se hace una reflexión sobre el año 2020 en el que la tierra obligó al Homo sapiens a detenerse y un mensaje final de por lo que tiene que luchar el pueblo africano.
Acabamos con un epílogo en el que se finaliza con un proverbio africano y se conoce lo que hizo uno de los personajes más significativos de la novela.
Entre los agradecimientos destacar a las personas que han estado a su lado y como no a África, asimismo a las personas que ya no están y le protegen desde el más allá.
Mi más sincera enhorabuena a Nativel