¿Si tuvieras la decisión de elegir que camino tomarías? Iqbal Masih decidió luchar y a pesar de todos los altercados e imprevistos que se encontró en su camino, desde el mismo momento en que nació, decidió sonreír y venir con una meta a la vida.
A nadie nos gusta hablar de la esclavitud infantil, pero Miguel Griot, el escritor de esta novela, con una extraordinaria prosa nos hace y nos cuenta la historia de un niño esclavo contada en primera persona por mucha gente que estuvo a su alrededor o gente que lo conoció. Tú lector, escoges la versión que más te llega al corazón de Iqbal. Yo ya tengo clara con la que me quedé.
Iqbal fue un niño que fue destinado desde su niñez a realizar trabajos forzados con sus manos, cosiendo alfombras en Pakistán. A pesar de ser un niño, su talante y su coraje convirtió a este chico en un ejemplo a seguir por su valentía y su confianza en él mismo.
¿Creeis que es importante tener una meta en la vida? yo creo que sí y Iqbal lo tuvo claro desde siempre, cuando tienes una meta no importa cómo sea el camino, sabes que tarde o temprano va a llegar y eso es lo que consiguió el pequeño protagonista de esta historia, ser libre y ayudar a todo el mundo que conocía de su alrededor. Hacer que pudieras conseguir los objetivos que se planteaban en su vida.
La historia de Iqbal va cargada de un gran simbolismo y sentimentalismo, gracias a reflexiones como las que os detallo a continuación:
“Cuando aceptas tus debilidades y confías en ellas eres capaz de romper una piedra con un huevo”
O “uno aprecia lo que tiene en la medida en que se compara con quienes tiene cerca”
Hay una apreciación de esta novela que me encanta a modo particular que es la reflexión que realiza nuestro personaje principal a la hora de referirse a la lectura y a los libros. Pocas novelas hacen referencia a ello, por eso me ha llamado especialmente la atención. La importancia o no importancia que en ocasiones damos los lectores o los escritores al mundo de las letras.
Iqbal transmite e irradia energía positiva a todo el que se acerca a él. En especial a Mudena que es la que en las últimas páginas de la novela le dedica una reflexión refiriéndose a su amigo. Os aseguro que en tramos os vais a emocionar y vais a poneros en su lugar…dejaros soñar.
Si con algo debemos quedarnos de Iqbal es con su conquista por la libertad con su manera de reír, con sus bromas con su conquista y lo más importante de todo que hasta que no consiguió por lo que luchó no descansó. Así que os invito a vosotros lectores a luchar siempre por vuestras ilusiones y vuestros sueños igual que lo realizó Iqbal por muchas penurias y muchos sacrificios que haya que pasar siempre aparecerá la recompensa de ver con tus propios ojos lo que siempre has deseado.
