Daniel Hernández Chambers, es un escritor español de novelas para público infantil y juvenil. Hoy lo entrevisto en Alquibla y lo comparto con todos vosotros ¿Quién es Daniel Hernández Chambers y cuáles son sus sueños? Un tipo que se pasa la vida imaginando historias y escribiéndolas. Desde pequeño soñaba con ver un libro mío en las estanterías de las librerías y las bibliotecas, y ahora que ese sueño ya se ha hecho realidad, sigo soñando con que en esas estanterías aparezcan más y más libros míos.
¿Desde qué momento supo que quería ponerse a escribir en forma de novela? Lo supe muy pronto, en el colegio. Creo que siempre que alguien me preguntaba qué quería ser de mayor, yo respondía que deseaba ser escritor.
¿Para qué tipo de público va orientadas sus novelas? La mayoría de las veces intento no pensar en un público lector determinado. No me refiero con esto a que escriba solo para mí, pues mi intención es que mis obras se lean, pero sí necesito escribir historias que a mí me apasionen. No puedo escribir una novela porque el tema está de moda o porque crea que le va a gustar a un grupo particular de lectores, es imprescindible que la historia me cautive. En definitiva, sí escribo para mí, porque disfruto haciéndolo, pero lo hago con la intención de que mis historias y mi forma de escribirlas les guste a los lectores.
¿Qué evolución ha presentado de su primera novela a la última publicada? Espero que mucha. La carrera de todo escritor ha de ser una evolución constante. Considero que da igual los años que uno lleve escribiendo, nunca dejará de ser un aprendiz. La idea es que cada obra sea mejor que la anterior.
¿Es difícil para un escritor novel encontrar una editorial que publique sus libros? Sí, lo es. No podemos perder de vista que una editorial es un negocio y que su intención es obtener beneficios. Un negocio extraño, pues combina el amor por la literatura con esa búsqueda de ganancias económicas, y no siempre las obras que mejor funcionan en ventas son las que mejor escritas están, eso lo sabemos todos. Además, tras un éxito de ventas las editoriales suelen buscar durante un tiempo lo que podríamos llamar novelas-clon, con la esperanza de repetir el éxito. Por eso a las editoriales en general les cuesta confiar en un autor novel y prefieren recurrir a autores que ya les pueden garantizar un cierto número de ventas, pero, por otro lado, todos hemos sido noveles alguna vez. Quien persiste lo acaba consiguiendo. Sin embargo, muchas veces al autor novel le puede su propia impaciencia y se rinde tras una primera negativa. Visto con perspectiva, creo que es positivo haber recibido alguna que otra respuesta negativa antes de conseguir publicar, así te exiges más a ti mismo.
¿Cuál de todos los premios ha recibido con mayor satisfacción? Todos. El primero porque antes de obtenerlo había sido finalista varias veces de otros concursos y empezaba a temer que no lograría ganar nunca un premio literario. El segundo, porque es un premio de mucho prestigio con una editorial como Edelvives, que es de las más importantes de este país, y porque me sirvió para convencerme de que el premio anterior no había sido solo cuestión de suerte. El tercero, porque fue justo un año después que el segundo. Siempre hay razones para que un premio te haga ilusión, pero sobre todo es importante mantener los pies en el suelo y continuar escribiendo.
¿Tiene proyectos en marcha?¿Piensa seguir escribiendo? Claro. No me faltan proyectos, la mayoría individuales y alguno que otro colectivo. No me planteo dejar de escribir, no creo que nunca lo haga.
¿Qué piensa del trato que se da a la cultura en España?¿y a las bibliotecas? Es, simplemente, de vergüenza. En este país no interesa la cultura ni la educación, que van profundamente relacionadas. Alguien que de verdad aprecia la cultura se felicita por vivir en un lugar donde existen tantas diferencias y tantas lenguas, porque las ve como algo enriquecedor y no al contrario. Que una biblioteca se cierre por falta de financiación, o que un colegio carezca de profesorado suficiente o de instalaciones en buenas condiciones son muestras de un país que ha perdido el norte. Que apenas existan programas de fomento de la lectura a nivel estatal o comunitario, o que los que sí existen (porque algunos hay y son muy buenos) no reciban el apoyo ni el reconocimiento que merecen demuestra que la clase política no tiene verdadero interés en lo importante. Que unos padres sean capaces de gastar 80-100 euros en unas botas de fútbol para su hijo de 8 años (que con suerte le durarán dos meses) pero en su casa no entre un solo libro indica que algo falla.
¿Qué piensa de Alquibla www.alquiblaweb.com como página de difusión de la cultura? Todo proyecto que sirva para difundir cultura merece el aplauso.