Hoy entrevisto a Jesús Tíscar, escritor de novelas como La poetisa entre otras. ¿Cómo nacen tus historias? ¿Las tienes en la cabeza antes de empezar a escribir o las construyes a medida que escribes? Suelo partir de una idea básica, a veces de una imagen, que se me instala, y entonces el “paladar” de mis sesos saborea y decide si vale la pena o es una tontería como un camión a la que no se le puede sacar mucho más.
Si un potencial lector que no te conociera de nada te preguntara:«¿Quétipo de libros escribes?», ¿Cuál sería tu respuesta? Le respondería lo que le respondió el escritor Alfonso Grosso a una periodista que le preguntó “¿qué es la literatura?”. “Ay, mujer, ¿y qué sabe el lagarto de Historia Natural?”, dijo el señor Grosso. Nunca he sabido responder a eso porque nunca me he abonado a un género concreto. No obstante, si hubiera un género llamado “apetecismo”, me acogería a él, porque suelo escribir lo que me pide el cuerpo. Como, además, no me hacen encargos…
Y si después te preguntara: «¿Por qué escribes?», ¿Qué le responderías? Bueno, yo creo que a esas alturas ya habría mandado al lector a la mierda, tanta pregunta tonta me pone de mala leche, no lo puedo remediar. Escribo porque no sé hacer otra cosa.
Cuando rellenas el campo «Profesión» en un formulario, ¿pones«Escritor»? Sí. Me da un poco de vergüenza, pero la supero.
La literatura solo da de comer a unos pocos elegidos, ¿tu objetivo es llegar a vivir de ella o escribes por otros motivos? Vivir de ella, por supuesto. Tras casi cuarenta años combinando alfabetos, estoy en mi derecho a seguir creyéndomelo. Pero vivir de ella bien, mucho, ganar millones y poder burlarme de los pobres mientras me atiborro de panettones, que me gustan mucho. Creo que aún estoy a tiempo de escribir las páginas perfectas con las que engatusar al mercado.
Hoy que cualquiera puede publicar, ¿consideras que hay un exceso de mala literatura en el mercado? Este tema me saca de quicio, me quita las ganas de vivir, me asquea. Uno es un escritor a la antigua, de los que se emborrachan y tienen gato, y esas páginas que anuncian “escriba su bestseller en 60 días” son obscenas, con eso no se puede competir, las librerías están llenas de bestseller escritos en dos meses, a ver quién puede con eso. Nadie. No quiero hablar de esto, al final me pongo faltón, más faltón que de costumbre.
¿Cómo puede el lector orientarse para elegir un buen libro ante la ingente cantidad de títulos que salen a la luz? Yo es que ya creo cada vez menos en los lectores. Los lectores se están extinguiendo, los consumidores de libros los devoran. Si eres lector, y no consumidor de libros, no te hacen falta consejos para elegir un buen libro, seguro.
¿Qué características debe poseer, según tu punto de vista, un buen libro? Que tenga los renglones derechicos… No, es broma. Un buen libro es el que contiene literatura, y eso se capta cuando está y te echa a patadas de sus páginas cuando no está. Ojo, literatura a tu gusto o a tu disgusto, pero, joder, literatura (arte), no redacción.
¿Qué debe contener para que tú lo consideres mediocre? Que diga “blanco como la nieve” y “como alma que lleva el diablo”. En cuanto leo eso, lo cierro y lo tiro o se lo doy al niño de mi vecina, que no lo soporto.
¿Internet ha matado o matará en el futuro los libros en formato papel? Lo matará, lo está matando. Nos está matando a todos. La naturaleza humana no está preparada para las nuevas tecnologías. Obviamente, sí para crearlas; pero no para soportarlas.