Rebeca del escritor Ramón Gómez de la Serna publicada en 1936. Novela de la nebulosa, según expresión del autor, que investiga en la conciencia de un personaje con escasa continuidad y cohesión.
Luis, cuya vida se concentraba en “la peripecia de estar buscando siempre el amor por el desierto de los aleros”, siente de pronto la inaplazable necesidad de buscar a la mujer ideal, que además debe llamarse precisamente Rebeca.
Tras una larga serie de encuentros con falsas Rebecas encuentra por fin en Leonor, viuda de raza judía, a la mujer presentida y soñada (…).
Personaje sin rostro, sin actividades prácticas definidas (su única profesión es la de “contemplar las musarañas”), de comportamiento imprevisible (“sabia muy bien que lo irregular es siempre mejor y más libre que lo regular”) y sin otro proyecto en la vida que el hallazgo de una mujer que ni siquiera sabe si existe, es difícil imaginarlo con una encarnadura y perfil determinados, ya que la principal percepción que de él tenemos es la de una conciencia caótica que se manifiesta en un denso precipitado de imágenes, gestos, sensaciones, objetos.
El encuentro con la mujer soñada libera al personaje de su angustia, lo salva de la incongruencia y lo hace reencontrar la armonía con el mundo y consigo mismo.
Autobiográfica en lo que se refiere al encuentro con la propia mujer del escritor, Luisa Sofóvich, aunque con muchos añadidos de ficción, de interpretación y fabulación de los acontecimientos. Repleta de digresiones, de anécdotas, de alardes verbales, de realidad caótica, delirante.
La intención de ese modo desacostumbrado de ensamblar los datos del mundo es la de descubrir un sentido más auténtico.
Para Nora el protagonista pertenece a esos personajes del autor que se pierden en nebulosa y que se distinguen por una inestabilidad afectiva y una conducta extravagante; por eso encuentra que le falta a la obra <<concreción, densidad, forma…unidad de cosa “terminada”.
Es el apunte, el borrador caótico, amorfo; es decir, lo opuesto a toda obra de arte. Libro artificioso, pero negligente; creación imaginativa, pero no acabada de expresar; insuficientemente dominada o defectuosamente captada por la inteligencia>>.
Para Camón <<es la novela más suprarrealista de cuantas ha publicado Ramón>>. Y la destaca dentro de la literatura europea. Interesante por las ideas acerca de la novela, según las cuales, junto con el amor, la novela es lo único capaz de dar sentido a la existencia.