Por su carácter extremadamente sensible y su elevado sentido de la libertad, nunca fue partidario de actos públicos ni de ostentar cargos oficiales (<<No he pertenecido nunca a ninguna secta política, social ni relijiosa: un uniforme es lo que más detesto en mi vida>> escribió en El trabajo…, pág. 211), pero la guerra civil le hizo tomar una postura decidida a favor del pueblo y de sus valores esenciales (<<lo que no puede cambiar>>).
En 1936 marchó, en compañía de su mujer, a América y, tras una fugaz visita a Washington y Puerto Rico, viajan a Cuba, donde trabajan algunos años. De allí pasan a Florida y Washington nuevamente, hasta que en 1951 fijan definitivamente su residencia en Puerto Rico.
En 1956 le fue concedido el Premio Nobel de Literatura, que recibió tres días antes de morir Zenobia, a la que solo sobrevivió dos años. El 29 de mayo de 1958 falleció en Puerto Rico.
Aunque él dedicó su obra <<a la inmensa minoría>>, en este rótulo se incluye el concepto de pueblo tal como él no entendía (una aristocracia espiritual capaz de comprender la poesía), en quien, en último término, han de redundar todas las mejores espirituales.
No debe olvidarse que siempre aspiró a <<aumentar cada día la calidad jeneral humana, sobre todo en la sensibilidad>>
A partir del Diario, su poesía, que se manifiesta como una búsqueda de la eternidad por la belleza, se hizo cada vez más esencial, más intensa en sus contenidos. Poesía, Belleza, La estanción total…, Animal de fondo, Dios deseado y deseante, ejemplos de su mejor <<poesía pura>>, expresan todo el valor de la esencia poética en Juan Ramón, que trasciende los límites meramente lingüísticos o artísticos.
Para él Poesía es todo, y no concibe la existencia sin ella, puesto que entiende la poética como actitud en la vida, en la que se incluyen moral, religión, política y arte.
En la poesía juanramoniana se han señalado tres etapas fundamentales, según indicó él mismo en la Síntesis ideal o resumen de su poética. Estas tres etapas, corresponden a distintos periodos cronológicos, son:
1) Primera o sensitiva, hasta 1916-17, coincidente con el triunfo del modernismo
2) Segunda o intelectual, a partir del Diario y Eternidades, coincidente con el novecentismo
3) Tercera o suficiente, a partir de 1936, coincidente con una visión transcendente del arte.
Estas etapas no hay que entenderlas como rupturas o cortes en su producción, sino como la evolución de una <<obra en marcha, en sucesión>>, caracterizada siempre por la búsqueda de la <<poesía pura>> o de la totalidad.
Esto explica la constante corrección de su obra anterior, siempre abierta, y la natural dificultad que se deriva de esta concepción de la poesía que él concibe como <<Unidad>>.
Muy bueno Eva.